En la 31 Feria Internacional del Libro de La Habana, celebrada en el Complejo Histórico Militar Morro-Cabaña entre los días 9 y 19 de febrero, la Casa Editorial Verde Olivo presentó el libro Son décimas encendidas de patriotismo y amor del teniente coronel Dionisio Álvarez Álvarez.

“Estas décimas no fueron concebidas para hacer un libro, se hizo un libro de esas décimas. Cada una contiene en sí puros sentimientos de amor y patriotismo”, expresó con los ojos llenos de alegría el autor.

¿Desde cuándo escribe décimas?

—Soy natural de Güines y desde pequeño escuchaba a mi padre silbar melodías de distintas décimas, me llevaba a lugares donde se reunían personas a cultivarla y así poco a poco me las aprendí y cree las mías, no con la intención de publicar sino de expresar mi sentir.

¿Cómo surge la idea de convertir esas emociones en un libro?

—Muchas décimas las hice a partir de solicitudes que me hicieron por diferentes fechas históricas. En una ocasión alguien de mi centro laboral me dijo que ya yo tenía décimas como para hacer un libro, me quedé pensando, las organicé y busqué asesoramiento. Hoy tengo el privilegio de decir que tengo reunidos mis poemas en un libro.

¿Qué representa para usted ver su obra reflejada en un libro?

—Para mí es súper importante porque mi obra va a poder ser empleada por niños y maestros para estudiar la historia de nuestro país, además, se van a poder nutrir de mis pensamientos y de mi forma de ver la vida.

Este libro propone al lector una compilación de versos apasionados que hacen reflexionar sobre el flagelo de la guerra, la voluntad de luchar por la justicia y de velar por nuestra historia. Concluye así con ese patriotismo encendido y con el amor en varias corrientes: a la madre, padre, amigos y a su pareja.

A mi madre

Madre tu eres la razón

que alumbra mi pensamiento,

pues en mi alma yo siento

la voz de tu corazón,

siento además la emoción

vibrante en tu pecho ardiente,

cuando serena y paciente

decías que era tu niño,

para poner con cariño

un dulce beso en mi frente.

Madre guía, luz de aurora

tu voz como dulce trino

va alumbrándome el camino

como llama abrazadora,

eres tú quien me acalora

con amor mi libertad

para mí eres la verdad

que conforma mi alegría,

tú mereces madre mía

eterna felicidad.

A mi padre

Era un seis de enero, en Güines,

murió mi padre querido,

y aún tengo adolorido

el pecho y sus tomeguines.

Lo busco allá en los confines

y encontrarlo yo consigo,

fue mi guía, fue mi amigo,

por su enseñanza sincera,

yo lo llevo adonde quiera

y el también anda conmigo.