La Sierra Maestra es la cordillera insigne del relieve cubano y ocupa las provincias de Granma, Santiago de Cuba y Guantánamo. Esta joya de la geografía sorprende por su estructura compleja, así como por la singularidad y belleza de la diversidad biológica.

Allí abundan los bosques tropicales húmedos, helechos arborescentes, palmas, plantas epífitas y otras especies vegetales. Su fauna está representada por numerosas especies de aves, anfibios, reptiles e insectos, por lo que constituye un reservorio de biodiversidad para la Isla.

La singularidad de sus paisajes muestra laderas empinadas con estrechas cañadas y pequeños valles intramontanos, en los que se mezclan de forma armónica la naturaleza y la vida diaria. La cadena de montañas ostenta las dos elevaciones más altas del país: el Pico Turquino y el Pico Cuba, con 1974 y 1872 metros sobre el nivel del mar, respectivamente.

El sistema montañoso ocupa un lugar destacado en la historia patria, siendo escenario de disímiles acontecimientos históricos desde el inicio de las luchas independentistas. Adquirió relevancia internacional después de ser el escenario de una gran parte de las acciones combativas que condujeron al triunfo revolucionario de enero de 1959.