La defensa del territorio nacional ante agresiones externas ha sido la razón histórica para la constitución de fuerzas armadas capaces de repeler los ataques y conservar el estado de paz. Las formaciones varían según las necesidades y costumbres de cada nación, y en casi todos los casos estas tropas se complementan y aseguran con las fuerzas que aporta el servicio militar. La idea central es la misma: preparar un contingente con el entrenamiento básico de combate que le permita ser movilizado rápidamente en caso de guerra.

En Cuba, la situación permanente de amenaza, unido al pequeño tamaño de la población y la economía cubana, imponen que la defensa nacional no sea exclusiva de un grupo de personas, sino una tarea de todo el pueblo.

Cada año el Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) convoca a los jóvenes varones próximos a arribar a los 16 años de edad para realizar el proceso de inscripción en el Registro Militar, en función del cumplimiento del Servicio Militar Activo (SMA). Sin embargo, la incorporación a las filas se produce a partir de que se concluya la enseñanza media superior, generalmente en el año en que se cumplen los 18 años.

El proceso de ingreso

La determinación de la aptitud médica de los jóvenes, se hace de acuerdo con lo dispuesto por los ministerios de las FAR y de Salud Pública, en las regulaciones para los exámenes médicos previos al alistamiento y llamado al servicio.

El reclutamiento es la incorporación de los ciudadanos al cumplimiento del SMA, y constituye una de las principales actividades para garantizar el completamiento de las unidades. Incluye el estudio de la situación político-social y económico-familiar de los jóvenes para que estos sean llamados y ubicados en correspondencia con su situación particular; así como trabajar para dar solución a la problemática que presenten y puedan cumplir su deber.

Este plan de incorporación concluye con el llamado, que es la actividad oficial de presentación y entrega de los prerreclutas a los representantes de las unidades a que han sido destinados.

Los reclutas reciben la preparación militar básica, popularmente conocida como etapa de Previa, que los capacita para la prestación del SMA en los centros de preparación. Concluida, se destinan como soldados o marineros a la unidad y cargo en que prestarán el servicio.

Beneficios

La etapa del desarrollo psicológico que coincide con el servicio militar es un momento sensible en la vida de los jóvenes en tanto se concretan las aspiraciones vocacionales, se toman decisiones futuras y se conciben proyectos de vida. Razones por las cuales durante este período los soldados son beneficiarios de una serie de estímulos y oportunidades laborales y de formación dentro y fuera de la vida militar.

El licenciamiento marca el inicio del paso de la categoría de permanente a la de reservista. Es por eso que uno de los beneficios más populares es el llamado reenganche o la posibilidad de formarse en los cursos de sargentos instructores. Al finalizar la Preparación Militar Básica, el estatus profesional les permite recibir condecoraciones y ascender en grados militares.

Otro de los estímulos más solicitados es la segunda oportunidad de ingreso a la educación superior mediante la Orden 18 del Ministro de las FAR. Se les brinda, además, la posibilidad de matricular en los cursos preparatorios que ofrece la Facultad Obrero Campesina para los exámenes de ingreso.

Las facilidades para la inserción laboral luego del licenciamiento para aquellos soldados con mejores resultados, es otra de las ventajas.

Al finalizar el SMA, los jóvenes interesados en el trabajo agrícola, pueden solicitar la entrega de tierras estatales ociosas en usufructo como una variante de empleo con asesoramiento diferenciado por las FAR y el Ministerio de la Agricultura.

Por otra parte, el licenciamiento puede ser otorgado 6 meses antes en los casos cuya trayectoria, actitud y resultados sean relevantes. Y a los 12 meses en todos los casos de cabos y soldados cumpliendo su servicio en la Brigada de la Frontera y en Guardafronteras del Ministerio del Interior. No obstante, durante este tiempo pueden ser ascendidos o condecorados por destacarse en el cumplimiento del servicio.

Las exigencias de esta preparación militar, además de su razón como cumplimiento del deber, también tributan a un resultado educativo y formador en cuanto a las aspiraciones vocacionales de estos jóvenes, la toma decisiones futuras y la concepción de sus proyectos de vida.

Para ellos el SMA constituye el momentodurante el cual adquieren las habilidades y la disciplina que les permite pasar a ocupar cargos en las unidades como reservistas oun desempeño exitoso en la vida civil, pero también estar listos para enfrentar y derrotar cualquier agresión a la patria.