Un viraje irreversible de la gesta guerrillera en la serranía oriental significó la victoria en la Batalla de Las Mercedes concluida el 6 de agosto de 1958. Era derrotada la ofensiva del ejército de Batista iniciada el 24 de mayo. La cordillera quedaba liberada para siempre con la expulsión de la soldadesca. El Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz comenzó a crear las condiciones tácticas y estratégicas para combatir al enemigo en el llano. Se había capturado un amplio arsenal militar y existía el contexto para armar más combatientes, comenzar una contraofensiva y extender la guerra a otras regiones del país.

Fidel convocó a los legendarios comandantes Camilo Cienfuegos y Ernesto Che Guevara. El primero comandaría la Columna Invasora No. 2 Antonio Maceo con la misión de llegar a Pinar del Río, y la Columna 8 Ciro Redondo dirigida por el Che rumbo a Las Villas.

Era revivir la gran hazaña protagonizada por Antonio Maceo y Máximo Gómez en la Guerra de 1895-1898. Emitió las respectivas órdenes.

El 18 de agosto, el líder rebelde firma la orden militar para la misión de Camilo, donde especifica la salida de El Salto el 20 de agosto: «Al Comandante de la Columna Invasora se le otorgan facultades para organizar unidades de combate rebeldes a lo largo del territorio nacional, hasta tanto los comandantes de cada provincia arriben con sus columnas a sus respectivas jurisdicciones[…]».¹

El 21 de agosto firma la orden correspondiente a la columna del Che; partiría de Las Mercedes entre el 24 y el 30 de agosto y tendría como objetivo estratégico batir incesantemente al enemigo en el territorio central de Cuba e interceptarlo hasta su total paralización.

En ambas órdenes se refería cómo aplicar las leyes establecidas del Ejército Rebelde, el cobro de impuestos y combinar las acciones con otras fuerzas revolucionarias en esos territorios.Equiparon las columnas con el mejor armamento en poder de la guerrilla, y jóvenes reclutas se unieron a los veteranos combatientes.

La Columna de Camilo emprendió la marcha el 21 de agosto desde El Salto en composición 2 de 82 hombres. Lehabló a sus aguerridos invasores sobre la misión encomendada, difícil pero honrosa, al llevar la guerra a Occidente. Recordó que llevaría el nombre de Antonio Maceo, tarea ya realizada por el Titán de Bronce.

El Che y sus invasores emprendieron la marcha desde Las Mercedes el 31 de agosto. Esta columna estaba formada por 140 combatientes. Al salir, el argentino arengó a sus hombres con mucha energía y optimismo, la misión era voluntaria, tal vez el 50 por ciento no pudiera llegar; el llano no era igual a la Sierra. Calificó la misión de peligrosa y dura pero cumplirían aunque llegara un solo guerrillero.

Se desplazaban a una distancia prudencial una de la otra, penetraron por la franja sureña deinhóspita naturaleza en la provincia de Camagüey.Así le escribió Camilo a Fidel: «Para empezar te diré que desde que salimos de la zona de Cauto con rumbo a Occidente, hemos caminado sin descansar una sola noche, cuarenta jornadas, muchas de ellas sin prácticos por la costa sur como orientación y una brújula por guía […]».²

A su paso por La Federal en Camagüey el 9 de septiembre, la vanguardia de la columna del Che cayó en una emboscada; este encuentro les permitió a las fuerzas enemigas ubicarlos y los siguieron acosando durante todo el recorrido. Ahora debían marchar con mucho cuidado, debido a que la aviación conocía la ruta aproximada.

Ambas columnas continuaban el avance impetuoso siempre bajo el acoso del peligro.Fidel escribió desde la Sierra Maestraal saber de las adversidades de las columnas guerrilleras en terrenos desfavorables, hasta llegar al centro del país: « […] no hay palabras con qué expresar la alegría, el orgullo y la admiración que he sentido por ustedes. Con lo que han hecho ya bastaría para ganarse un lugar en la historia de Cuba y de las grandes proezas militares».³

Las columnas se adentraron en el territorio villareño en los primeros días de octubre. El Che emprendió la campaña de Las Villas desde las estribaciones del Escambray hasta tomar la ciudad de Santa Clara.

El Comandante en Jefe le cambia la estrategia de su misión inicial a Camilo y le ordena mantenerse en el territorio para apoyar la columna del Che. En el Frente Norte de Las Villas libera el poblado de Yaguajay y continúa con paso exitoso hacia otras localidades.

Victoria tras victoria, los mambises del siglo XX cumplieron su cometido.

Referencias:

¹ Fidel Castro Ruz:La Victoria estratégica, Oficina de Poblaciones del Consejo de Estado, p.489.

² y ³ Invasión de Camilo y Che: Por la ruta de los libertadores”, Periódico Trabajadores, 19 de agosto de 2018.