Educar para vivir supone integrar valores que son vitales para quienes, jornadas, tras jornadas, muestran lo más bello del alma a través de besos, abrazos y un te quiero. La solidaridad, el desprendimiento, la valentía, son virtudes encontradas en nuestro pueblo.

Los que amamos esta tierra, escribimos la mejor enseñanza de los hechos históricos, nacidos gracias a la gallardía de hombres y mujeres que resisten por más de medio siglo un riguroso bloqueo económico y financiero.

En escenarios complejos hemos comprobado la tenacidad y la fuerza de de los cubanos; ellos han sabido utilizar la mejor de las armas —las ideas—, contra un adversario que injuria pero no rebasa la resistencia de este país.

Para nosotros, la unidad tiene un significado que describe el progreso de la sociedad formada por más de seis décadas, en los principios de aquellos que nos antecedieron. Cada ciudadano sabe defender lo que ama, convirtiéndose en soldados de la Patria.

Las tareas de hoy son duras; recaban del impulso de ti y de mi en los diversos entornos en que extendamos la actividad productiva. Darlo todo de sí mismo, enseñar a trabajar con seriedad, responsabilidad y disciplina, son fortalezas que no llegan solas, tenemos que perseverar hasta llegar a la meta soñada.

Fidel reflexionaba hace algunos años: “Mientras más diversa sea la economía de un país, más diversos serán sus mercados”, bajo ese precepto estamos llamados a laborar para aumentar los servicios en la población y el avance en las diversas plataformas de desarrollo.

“No hay gaita que nos pueda derribar”, así refleja Silvio Rodríguez en una de sus canciones. Un contexto mundial complejo por la crisis económica que está viviendo la humanidad, resultado de la situación sanitaria —covid–19—, sin embargo estudiamos y aplicamos estrategias de avance en los diferentes renglones de la producción nacional.

Cubanos y cubanas recordemos a nuestro guía Fidel Castro Ruz cuando señaló: “[...] ningún país se ha enfrentado a ningún adversario tan poderoso, tan rico, a su maquinaria de publicidad, a su bloqueo [...] nosotros hemos sido testigos de las cosas que ha hecho este país, cómo resistió, cómo avanza [...] ”.

Lo más bello del alma se engendra en una tierra que tiene seres admirables.

Son muchas las historias de vida de quienes a diario pintan con todos los colores, montañas, ciudades, escuelas... esos entornos irradian la identidad que nos define.