Con el objetivo estratégico de liberar El Escambray de guarniciones enemigas,el 21 de noviembre de 1958, fuerzas de la Columna No.8 Ciro Redondo y del Directorio Revolucionario 13 de Marzo (DR13M) —unos 60 rebeldes— atacaron el cuartel de la guardia rural de Caracusey, a unos kilómetros de la ciudad de Trinidad.La sólida construcción de piedra y cemento estaba fortificada con alambres de púas y sacos terreros, y defendido por 22 soldados al mando del sargento Cleto Pérez.

La noche anterior se reunieron en El Algarrobo y “en breve intercambio con los combatientes, Abrantes y el Vaquerito resaltaron el hecho de que era la primera vez que las dos organizaciones se unían en una acción”

”Faure Chomón ha referido que antes de que esos efectivos partieran rumbo al objetivo, indicó a Cubela acerca de una emboscada de apoyo en la carretera de Trinidad, recomendándole destinar a ella a los combatientes mejor armados […] hizo todo lo contrario: concentró los efectivos mejor armados en Caracusey […] además escogió para la emboscada un sitio llano y desguarnecido”.

Desde Trinidad el ejército envió un fuerte refuerzo que chocó con la débil emboscada, la cual se replegósin hacer resistencia.Esto fue aprovechado para seguir avanzando en auxilio de los cercados.

El resto de los rebeldes (40 aproximadamente) rodeaban el cuartel.Un disparo precipitado del bazuquero obligó a comenzar el combate cerca de las 04:00 horas de ese mismo día.

Los disparos de bazuca se repetirían en el fragor del recio combate, pero las sólidas paredes resistían, lo que unido al lanzamiento de cocteles molotov, fabricados por los propios vecinos, producían aparatosos incendios.

Alas 06:00 horas, con el cuartel semidestruido y en llamas, se conoció del acercamiento del refuerzo enemigo y el posible ataque de la aviación.Teniendo en cuenta la hora avanzada del día ylas condiciones del combate, se decidió la retirada.El hecho dejó un saldo de 12 soldados heridos y ninguna baja por parte de los revolucionarios.

Varios compañeros se destacaron, entre ellos: el Vaquerito, Ramón González Coro, Raúl López y VíctorDreke.

El cuartel no pudo ser tomado, pero la soldadesca tuvo que abandonarlo. El objetivo estratégico se había cumplido. Esta acción contribuyó positivamente para las futuras operaciones entre el Movimiento 26 de Julio y el DR13M, como serían e lrechazo de la ofensiva de El Pedrero, la firma del Pacto del Pedrero y la ofensiva relámpago conjunta en la provincia de Las Villas bajo la máxima dirección del Che hasta la gran victoria del Primero de Enero.

Fuente consultada:

Luis Rosado Eiro, Felipa Suárez Ramos. Una mancha azul hacia el occidente. Casa Editorial Verde Olivo. La Habana, 1999. Pág. 201-202.