¿Quién es José Martí?
Cuando un ser humano, a 171 años de su natalicio, sigue tan presente, vale la pena acercarse a su trayectoria vital.
José Julián Martí y Pérez nació y creció en una sociedad marcada por la opresión, la injusticia y la desigualdad; por ello, toda su vida se proyectó contra esas calamidades. Cuando el estallido redentor del 10 de Octubre, con apenas 15 años, tomó el arma que tenía a su disposición —la pluma— y se convirtió en un combatiente clandestino. Condenado a trabajos forzados y encadenado, supo más sobre la indignidad y la injusticia. Desterrado a España, con la carne y el alma heridas, volvió a tomar la pluma para combatir. Sus estudios en Zaragoza fueron una breve pausa, necesaria para afilar las armas de la inteligencia.
El regreso a América, a México, donde muy pronto creció su prestigio como intelectual y periodista de fuste, le abrió las puertas a otras visiones y luego, Guatemala, amplió esas visiones y «lo hizo maestro».1 De vuelta a Cuba tras el Zanjón, entre sus múltiples actividades estuvieron las conspirativas con el propósito de reiniciar la lucha armada por la independencia y ello le costó un nuevo destierro. Una vez en España, pronto escapó hacia Francia y de allí hacia Nueva York, donde se radicó, con una breve pausa—su estancia en Venezuela—, que definió su compromiso con una madre mayor: «De América soy hijo y a ella me debo».2
En la cosmopolita urbe neoyorkina creció su prestigio. Allí fue el orador insigne que enardecía multitudes con su acendrado patriotismo; el periodista reconocido en todo el mundo hispanoamericano,de cuyos principales diarios era corresponsal y trataba, entre otros temas, el desarrollo de aquella sociedad rapaz que conoció tan de cerca y en la que logró avizorar las pretensiones imperialistas; el diplomático3 que desde las tribunas de la Conferencia Monetaria Internacional pudo frenar las apetencias yanquis de convertir a la América en su patio trasero; el maestro de seres de distintos colores e idéntica humanidad;4el ensayista preclaro que nos enseñó el nuestroamericanismo; el poeta sublime en cuyos versos estremecen la ternura y la pasión; el creador de La Edad de Oro, obra destinada al público infantil que, a más de cien años de su aparición, sigue diciéndonos cómo contribuir a la formación ética de las nuevas generaciones…
Tantas cosas que es muy difícil entender cómo un ser humano puede ser tanto a la vez. Mas fue, sobre todo, el organizador del Partido Revolucionario Cubano, quien con su palabra encendida y su labor incesante logró la unidad de las emigraciones, de los veteranos y los pinos nuevos, de los cubanos de adentro y de afuera… en un solo puño y una sola voluntad; el estratega que alzó la guerra necesaria para derrotar al león español y construir la república «con todos y para el bien de todos», en la que la ley primera fuera “el culto de los cubanos a la dignidad plena del hombre”;5 el simple mortal de extraordinaria inteligencia y capacidad para avizorar el futuro, que nos legó el arsenal de ideas que son hoy nuestra mejor arma contra el enemigo de siempre.
También nos enseñó que «[…] la muerte da lecciones y ejemplos […]» y«[…] nos lleva el dedo por sobre el libro de la vida […]», porque así «[…] se va tejiendo el alma de la patria!».6
Como Céspedes, Maceo, Mella, Fidel y tantos otros es nuestro referente y nuestra guía. Es el alma de la Patria.
1 ________: «Guatemala», en ob. cit., t. 7, pp. 116-117.
2 ________: «Carta a Fausto Teodoro Aldrey», 27 de julio de 1881, en ob. cit., t. 7, p. 265.
3] Véase en esta página web, de María Luisa García Moreno: «Martí, ¿diplomático?».
4 En alusión a La Liga, sociedad creada con el propósito de instruir y educar a negros y mestizos con pocas posibilidades económicas.
5 José Martí: «Discurso en el Liceo Cubano de Tampa», 26 de noviembre de 1891, en ob. cit., t. 4, pp. 270 y 279.
6 _______: «Discurso en el Liceo Cubano de Tampa», 27 de noviembre de 1891, en ob. cit., t. 4, p. 284.