Fidel y la solidaridad con Puerto Rico

Por María Luisa García Moreno
29 de Marzo de 2023

Fidel discute con el general Uría, jefe de la Policía. Foto: OAH

Entre abril de 1949 y septiembre de 1950, Fidel se presentó a 46 exámenes y obtuvo sobresaliente en más de la mitad; por lo que en octubre de 1950 tenía en su podersus tres títulos universitarios.

 

El 30 de octubre, estalló en Puerto Rico la insurrección de Jayuya.[1]La heroica defensa de los patriotas,lidereados por Albizu Campos,[2]terminó con el asalto delas fuerzas policiales a su casa y su detención. Mientras, en Cuba se produjo una explosión de solidaridad con el pueblo hermano: al frente estaban los estudiantes, que organizaron actos, interrumpieron el tránsito y enfrentaron a los agentes de la Policía.

 

En la Escuela de Derecho de la Universidad de La Habana, se pronunciaron palabras de simpatía hacia los líderes expulsados de la Universidad de Río Piedras, en San Juan, por haber defendido la independencia de su país;en el anfiteatro del hospital universitario Calixto García, se realizó una asamblea en la que centenares de jóvenescondenaronla represión de los puertorriqueños. Después se concentraron en la escalinata, desplegaron una bandera de Puerto Rico y se lanzaron a la calle.

 

La presión estudiantil forzó al jefe de la Policía Nacional, general Quirino Uría, a intervenir. Con él discutió, en la esquina de las calles M y San Lázaro, el abogado Fidel Castro Ruz. Acompañados ambos por Lionel Soto y otros estudiantes, fueron al Ayuntamiento, donde se les expidió el permiso para  efectuar una manifestación.

 

La presión del pueblo cubano y, en particular de los universitarios, contribuyó a salvaguardar la vida de Albizu Campos y demás líderes puertorriqueños, a pesar de que la delegación que viajaría a Puerto Rico fue detenida en Miami y obligada a regresar a La Habana, lo que causó un serio incidente diplomático.

 

El 7 de noviembre se efectuó un multitudinario acto popular en la escalinata. Para resumir el acto, la FEU designó al jurista Fidel, quien declaró que el caso de Puerto Rico era una gran injusticia y que la respuesta del pueblo cubano ante lo ocurrido en la isla hermana: «[...] no pretende incitar el odio entre […] el pueblo de Cuba y el pueblo de Estados Unidos, sino […] defender […] esa causa justa que es la independencia a la que tienen derecho todos los pueblos de la tierra».

 

También expresó que«[...]el problema de Puerto Rico tiene cincuenta años de existencia». Más adelante señaló: «Dos grupos de razones, unas económicas y otras políticas, se han esgrimido contra la independencia de Puerto Rico. Son las mismas razones que se esgrimieron contra los cubanos cuando reclamaban la independencia de Cuba. Lo mismo que decía España de Cuba dicen ahora los malos norteamericanos de Puerto Rico, del pueblo puertorriqueño».

 

Refirió también que «La principal razón política esgrimida es una mentira y constituye una gran injusticia porque allí, en Puerto Rico, la mayoría del pueblo quiere la libertad. Tal vez no todos estén dispuestos a pelear, como ocurrió en Cuba durante la colonia […]pero ni un solo puertorriqueño rehusaría la libertad […]». «En estos días —añadió— se ha calumniado a Albizu Campos […] Por eso estamos aquí esta noche, rindiéndole este homenaje de adhesión a Pedro Albizu Campos y a su pueblo que ama la libertad. Estamos aquí para demostrar que la universidad y los estudiantes de Cuba estamos unidos contra los tiranos […]».

 

Después se sumó al Comité de Abogados Pro Independencia de Puerto Rico, organización que, el 4 de abril de 1951, dirigió un escrito firmado por 252 juristas a la V Reunión de Consulta de los Cancilleres de las Repúblicas Americanas, en el que se solicitaba al Gobierno estadounidense «[…] la liberación de Albizu Campos y demás patriotas puertorriqueños presos en Puerto Rico y los Estados Unidos». La solidaridad con el pueblo puertorriqueño y con todos los pueblos oprimidos siempre fue esencia misma del ideario fidelista.

 

Referencias:


[1]El 30 de octubre de 1950, los nacionalistas organizaron una revuelta social independentista, al irrumpir en el cuartel de la policía e izar la bandera puertorriqueña —actividad prohibida desde la ocupación— iniciaron así el histórico alzamiento de Jayuya, en San Juan, que duró diez días y se extendió rápidamente en más de cinco regiones del país. Sus líderes fueron Pedro Albizu Campos, Blanca Canales Torresola y Guillermo Rafael GonzálezUbildes.

[2]Pedro Albizu Campos (Ponce, Puerto Rico, 1893-San Juan, 1965). Patriota y político más relevante en la lucha por la independencia de Puerto Rico durante la primera mitad del siglo xx. Fue condenado a 79 años de prisión, 54 en régimen de trabajo forzado.