En el Panteón de los Veteranos de la Necrópolis de Colón se efectuaron, en la mañana de hoy, las honras fúnebres del Héroe de la República de Cuba, general de división (r) Antonio Enrique Lussón Batlle.

La exposición de la urna cineraria estuvo acompañada por sus numerosas condecoraciones y ofrendas florales del General de Ejército Raúl Castro Ruz, el Primer Secretario del Partido y Presidente de la República de Cuba Miguel Díaz-Canel Bermúdez, el Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR), la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana y familiares.

Presidieron la jornada el Comandante de la Revolución Ramiro Valdés Menéndez, el comandante del Ejército Rebelde José Ramón Machado Ventura y el viceministro de las FAR general de cuerpo de ejército Joaquín Quintas Solá. Las notas del Himno Nacional y tres salvas de fusilería marcaron el inicio del homenaje póstumo.

“Su vida y obra constituye un ejemplo de modestia, honestidad, entrega sin límites a su profesión, a las FAR y a la Revolución, a la que lo unió una lealtad infinita”, expresó el general de división (r) Samuel Rodiles Planas en las palabras centrales del acto.

Al concluir la guardia de honor realizada por dirigentes, oficiales de las FAR y el Ministerio del Interior y otros compañeros, se colocó la urna en el osario, para posteriormente trasladarla hacia el Mausoleo del Segundo Frente Oriental Frank País, donde descansará eternamente.

El legado revolucionario del Héroe se mantendrá por siempre como ejemplo que guiará a las actuales y futuras generaciones en el camino del deber y la fidelidad.