Pocos datos se encuentran sobre la vida de esta patriota, pero se conoce que fue quien enarboló la enseña nacional cuando los villaclareños decidieron incorporarse a la lucha anticolonial en el lugar conocido como Cafetal González. Fue además colaboradora del Club Hermanas de Juan Bruno Zayas durante la gesta de 1895.

Comienza la insurrección en el centro del país

El frío hacía temblar a algunos de los 500 participantes fuertemente armados del alzamiento de Las Villas el 7 de febrero de 1869 en la finca Cafetal González, propiedad de José González, hermano de Pastora, pero ninguno se marchó del lugar: había comenzado la insurrección en el centro de la Isla. En esa ocasión, fue la patriota villaclareña quien enarboló la enseña nacional en señal de rebeldía y decisión de luchar por la libertad de la Patria.

Al igual que otras mujeres de la región, por sus actividades antiespañolas la retuvieron en la cárcel de mujeres ubicada en la iglesia Nuestra Señora del Carmen.

Un gran gesto de valentía

Cuando liberaron a las prisioneras de Nuestra Señora del Carmen, posiblemente durante el llamado Pacto del Zanjón, no se precisa hacia qué lugar transfirierona Pastora, como sí sucedió con otras patriotas.

Se sabe que fue protagonista de un hecho heroico gracias una crónica publicada en la prensa por el periodista Manuel García Garófalo durante la Guerra del 95, al referirse a la muerte del patriota y músico Néstor Palma, quien se refugiaba en la finca Punta Cana propiedad de Pastora González, cerca de Antón Díaz en Santa Clara.

Destaca Garófalo la valentía de esta mujer que salvó a la esposa y los hijos del músico Néstor Palma de la furia de la soldadesca española, trasladándolos a caballo hasta Trinidad de donde procedían los familiares de Palma.

Su nombre figura en los listados de mujeres villaclareñas que participaron en la guerra del 95, organizadas como colaboradoras en el Club Hermanas de Juan Bruno Zayas.

Muerte de la patriota villaclareña

Apunta la historiografía nacional que, al finalizar el colonialismo español, el movimiento «Reliquias por la Patria» organizado por los veteranos de la guerra, recogieron los restos de los patriotas villaclareños caídos en diferentes puntos de la isla y los sepultaron en un panteón en el cementerio general de Santa Clara dedicado a estos héroes.

En esa acción tuvieron en cuenta los restos de Néstor Palma sepultados en la finca Punta Cana. Del mismo modo, los de Pastora, cuando falleció de muerte natural en ese mismo lugar en los albores del siglo XX.

Fuentes consultadas

Ecured

El Cafetal González. Juventud Rebelde, 3/7/2025.