Volvemos a la edición especial de Verde Olivo de 2013 y con ella homenajeamos el impulso patriótico de los jóvenes del Centenario.

El ímpetu del Asalto nos circunda y como herederos de él, abrazamos la tradición aprendida de encarar reveses y convertirlos en victorias.

Desde las Fuerzas Armadas Revolucionarias homenajeamos este 26 de Julio sabiéndonos continuadores de los jóvenes del Centenario. Portamos esa misma firmeza, apoyamos el desarrollo del país y nos mantenemos fieles a la confianza del pueblo.

Cuando en 2013 se conmemoró el aniversario 60 del Asalto a los Cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes, emergió una edición especial de Verde Olivo que convocó al recuento histórico.

Hoy, a 69 años de “… la mañana de la Santa Ana”, volvemos a esas páginas de eterna vigencia que agruparon no solo el Asalto sino el camino irreversible que terminaría con el triunfo revolucionario.  

La revista evoca la tenaz resistencia de Fidel Castro Ruz ante el tribunal que lo juzgó por su responsabilidad en el levantamiento revolucionario del 26 de julio de 1953. En su vibrante alegato de autodefensa el líder de la Revolución cubana fue categórico en afirmar: “[...] si el Moncada hubiera caído en nuestras manos ¡hasta las mujeres de Santiago de Cuba habrían empuñado las armas! [...]”.

Y sobre las hazañas que ellas protagonizaron en apoyo al Asalto también nos adentra Verde Olivo. Haydée Santamaría y Melba Hernández, las amigas que separadas, albergaban la angustia de quedar excluidas de las acciones y sin embargo, fueron testigos de  asesinatos y torturas en el hospital civil Saturnino Lora. Más tarde, estarían en sus manos la edición, impresión y distribución de La historia me absolverá.

De manera singular la edición rinde tributo a los jóvenes que ofrecieron sus vidas protegiendo a la Patria. El martirologio nos muestra sus rostros, muchas veces desconocidos para las nuevas generaciones. Tasende, herido en combate y después salvajemente asesinado, fue la mayor denuncia a los horrendos crímenes de los esbirros batistianos el 26 de julio de 1953.

Sus hazañas en las acciones de los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes demanda del recuerdo eterno, y las vidas que entregaron nos exigen el juramento de ser fieles a la ideología por la que lucharon y murieron.

Imposible no enaltecer en este número especial la exitosa dirección del Comandante en Jefe. Sus dotes organizativas y la capacidad minuciosa con que preparó a los jóvenes del Centenario son atestiguadas en entrevistas a varios de los asaltantes que estuvieron junto a él. 

Con la firme determinación de que Fidel y su obra vivirán eternamente en el corazón de los cubanos dignos y agradecidos, compartimos nuevamente con usted, querido lector, esta edición especial cargada de patriotismo; una inyección soberana de amor a Cuba, para afianzarnos a la convicción de que la victoria continúa en nuestro pueblo y que esa convicción es de ¡Patria o Muerte!